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Nuestra Señora de Fátima y la modestia – Moda e Modéstia
Notificación Concerniente a las Mujeres que Visten Ropa de Hombres
13 de maio de 2015
Carta de Apoio do Padre Lodi
23 de maio de 2015

Nuestra Señora de Fátima y la modestia

Fonte: Fatima.org

NUESTRA SEÑORA DE FATIMA INSISTIÓ EN LA MODESTIA EN EL VESTIRSE
         Dénos normas de conducta sobre la Modestia

En diciembre recibimos una carta del Sr. Joseph B. de Nueva York que nos pidió solicitar al Vaticano para proveer normas de conducta sobre la Modestia en el Vestirse.

Su carta es la que sigue:

“Estimado Padre Gruner,

         “Tres veces este año he escrito al Vaticano para obtener información sobre el tema de LA MODESTIA. Dos veces escribí al Cardenal Ratzinger y una vez (recientemente) al Papa Juan Pablo II. En estas cartas pedí folletos, historia, documentos, etc. en que LA MODESTIA sería plenamente explicada. No recibí ninguna respuesta.

         “Le pido –Padre Gruner- ¿de alguna manera, podría hacer que en el Vaticano me provean este material? Por favor. Ya sabe que en Fátima, la Santísima Virgen María dio mucho énfasis a LA MODESTIA. Ella dijo que quería que la gente se vistiera con modestia.

         “Durante todo este año he estado preguntado todo lo posible sobre el tema de LA MODESTIA pero nadie parece saber ni tener interés. Hay que tener información detallada sobre LA MODESTIA, debido que la Madre de Dios no nos pediría vestirnos modestamente si no hubieran normas de conducta para seguir. ¡Respóndame por favor!

Sinceramente, Joseph B., Nueva York.”

Nuestra Respuesta:

          Respondemos a este pedido con aprehensión. Sabemos que hoy hay mucha oposición contra la enseñanza de la Doctrina Católica con respecto de la Modestia en el Vestirse por parte de algunos laicos y hasta de algunos obispos. El Vaticano en el pasado ha dado normas de conducta claras referente a la Modestia en el Vestirse.

         Tal vez porque haya habido oposición y extensa desobediencia contra estas normas de conducta que el Vaticano rehúsa publicar una nueva declaración.

         Dios permite hoy que seamos castigados con el silencio del Magisterio (la autoridad docente de la Iglesia) a causa de los pecados de no obedecer el Magisterio cuando habló alto anteriormente. Esto es semejante a la manera como Dios respondió a la dureza de los corazones de la gente del Antiguo Testamento. Como castigo, Dios no envió profetas a la gente del Antiguo Testamento durante cuatrocientos años, después de que la gente había asesinado y rechazado muchos de los profetas que previamente les había enviado.

         Si cualquiera quiere conseguir la última declaración clara sobre las normas de conducta del Vaticano y de las autoridades de la Iglesia, puede obtenerla de las oficinas de la Cruzada Internacional del Rosario de Fátima; pida el folleto sobre la Modestia en el Vestirse. (#LF05) Las normas de conducta esenciales que el Vaticano dio en este asunto están sumariadas en un párrafo que citamos aquí:

“Un vestido no se puede llamar decente cuando es demasiadamente descotado o sea con largura de dos dedos abajo del hoyo de la garganta; el cual debe cubrir los brazos por lo menos hasta los codos; y apenas extiende un poco más allá de las rodillas. Además, los vestidos de materiales transparentes son impropios.”
Siguiendo estas normas de conducta tanto como los consejos especiales del Cielo, el Padre Pío, sacerdote estigmatizado que llevó las heridas ensangrentadas de Cristo en su propio cuerpo desde 1918 hasta su muerte en 1968, repetidas veces rehusó absolver a cualquier mujer, por importante que fuera, que no llevara sus faldas bien abajo de las rodillas. También insistía que no usaran pantalones. Sin embargo, debido a la ignorancia, al prejuicio, a la esclavitud de la moda, a la vanidad o a la pasión, se han combatido tanto estas líneas de orientación.

         Varios años atrás, aún dos obispos entraron temporalmente en la lucha. Se sentían obligados perseguir The Fatima Crusader (La Cruzada de Fátima) en 1979 por publicar este material. Uno de estos obispos, antes de su muerte, varios años después, parecía más dispuesto oír la verdad.

          Por tanto esperamos que entiendan por que hoy en día muchos sacerdotes no quieren hablar sobre este tema. No obstante, por parte de Nuestra Señora de Fátima y por la salvación de las almas, intentaremos explicar el asunto más ampliamente aquí.

          Estamos de acuerdo con que el Sr. Joseph B. hace una pregunta importante. Esta pregunta es tan importante porque si no se le responde correctamente, puede resultar en la pérdida de almas inmortales. Estas almas tienen un valor infinito porque Jesucristo pagó por ellas con el derramamiento de Su Preciosísima Sangre. La inmodestia en el Vestirse, si fuera gravemente ofensiva, sería un pecado mortal para la persona que usa tal ropa y es una ocasión de pecado para el espectador de las modas inmodestas. Resulta que las modas inmodestas tomadas en sí mismas, mandan al Infierno, o por lo menos hacen merecer el fuego del Infierno, a las almas de muchos de aquellos que vean estas modas.

         Nuestra Señora de Fátima lamentaba que en nuestros tiempos los ateos militantes, los satanistas y otros anti-cristianos tales como los comunistas y humanistas seculares y sus asociados en nuestro propio país, difundirían sus errores en contra de nuestra Fe y en contra de la Moral Católica y Cristiana. Nuestra Señora dijo: “Rusia esparcirá sus errores por el mundo.” Ella también dijo, “Ciertas modas se introducirán que ofenderán mucho a Nuestro Señor.”

          La Santísima Virgen María también nos dice en Fátima que “Más almas van al infierno por causa de los pecados de la carne, que por ningún otro motivo”.

          Hay un numero de pecados contra la Pureza a los que Nuestra Señora se estaba refiriendo y hay una necesidad de la enseñanza clara de que solo a las personas que están casadas le está permitido tener relaciones generativas. Todos los demás, que no están casados, no pueden usar ni aún dar su consentimiento a cualquier placer relativo a las facultades generativas. Ni se permite que estas facultades sean voluntariamente estimuladas salvo dentro del matrimonio. Esto es porque el poder de engendrar hijos es un cargo sagrado que Dios dio a los hombres y a las mujeres para utilizarse únicamente según sus leyes.

          Como Creador de cada un de nosotros y como Creador del alma inmortal de cada hijo, tiene un derecho de exigir que Le obedezcamos. El Padre Pelegia, S.T.D. explica estos asuntos de manera general en The Fatima Crusader. En respuesta a los pedidos del Sr. Joseph B y de muchos otros y por motivo de que estos pecados contra la sagrada Pureza son particularmente predominantes hoy en día causando la perdición de muchas almas, publicamos aquí el articulo del Padre Pelegia acerca de la Modestia en el Vestirse.

Información fundamental

         Para ayudarle a entender más ampliamente la explicación del Padre Pelegia dada abajo, sería útil algún fundamento de Teología: A causa del Pecado Original, cada hombre, mujer y niño encuentran difícil controlar algunos de sus apetitos aún que sepan, por su raciocinio, que hacerlo es de su mayor interés y provecho propio.

         Por ejemplo, todos pueden recordarse comiendo apenas un poco demasiado después de que el raciocinio y los sentidos le dicen que ya tuvo bastante. Otros han sentido el deseo de beber más alcohol, o fumar más cigarros aún que sepan que cualquier aumento no es bueno. Los apetitos por lo tanto, como los apetitos con respecto a la comida y la bebida, claramente buscan ciegamente “obtener su propio fin” aún cuando sea mal para la persona quien es el dueño de ese apetito.

          No tenemos siempre el control directo sobre como se sienten los apetitos de nuestros sentidos. Los podemos controlar con la mortificación cristiana tanto como con otros métodos indirectos. Por ejemplo, no permitiendo que la mente esté enfocada en la comida, la bebida o el tabaco, podemos resistir más fácilmente al pecado de la glotonería. Si continuamos pensando en la comida, la bebida o en el placer que nos dan, entonces inevitablemente nos entregaremos a nuestros apetitos, aún en contra de nuestro mejor juicio.

         Ya que por el Pecado Original, este apetito para el sexo, la facultad generativa en todos los hombres y en todas las mujeres, tampoco está siempre sujeto al control directo de la voluntad y del intelecto.

         Este apetito es también controlado indirectamente por medio de la mortificación, del ayuno y de la abstinencia, tanto como por evitar pensar en ciertas personas que tendrían la tendencia a despertar un deseo en este apetito. Siendo que este apetito es tan poderoso (Dios lo hizo en tal manera para asegurarnos la continuación de la raza humana) no se necesita mucho provocar el deseo de la facultad generativa. A causa de las naturalezas distintas entre los hombres y las mujeres, es generalmente verdad que el deseo sexual de los hombres es más fácilmente provocado.

         Es por el mirar a las personas inmodestamente vestidas del sexo opuesto que la personas, especialmente los hombres, se encuentran que el apetito para el uso de la facultad generativa les está conduciendo a ejercitar esta facultad. Esto le puede acontecer aún cuando sea en contra de la ley de Dios, y, por tanto mal para esta persona. Eso es cuando este apetito no está dirigido hacia la esposa de uno, y si así es, después de pensar y consentir suficiente y plenamente en él, entonces esa persona ha cometido un pecado mortal.

         Si no se arrepiente de este pecado, eventualmente arrastraría esa alma al Infierno por toda la eternidad.

         Por tanto, debido de esta debilidad que nuestros hermanos y hermanas sufren a causa del pecado original, tenemos que salvaguardar su virtud vistiéndonos modestamente. Tanto los hombres como las mujeres tienen la obligación de vestirse modestamente en razón del juicio y de la caridad estricta. Lo que ofenda en este asunto, es frecuentemente un pecado mortal.

          A causa de las diferencias en psicología entre los hombres y las mujeres es normalmente el caso que el demonio, sus agentes humanos y otros anti-cristianos, intentan influenciar a las mujeres a vestirse inmodestamente. Con esta estrategia el demonio y sus partidarios muchas veces tienen éxito en causando a los hombres y a las mujeres caer en el Infierno. Realizan esto para hacer pecar mortalmente a los hombres por sus ojos, deseos y acciones impuras. Esto también causa que los hombres sean esclavizados en este mundo por los ateos militantes como se explica en el librito El llamado urgente de Nuestra Señora. Las mujeres por su manera inmodesta de vestirse son enviadas al Infierno por haber hecho pecar a los hombres. Ellas también, por lo tanto, dan a los Comunistas, a otros ateos militantes y a los anti-cristianos la mayor posibilidad de esclavizar al mundo libre.

          Es un error leer entre los reglones con respecto a esta solicitud a la modestia como si fuera algo contra la mujer. Tanto los hombres como las mujeres están obligados por la ley de la modestia. Sin embargo, es mucho más común que las mujeres cometan el pecado de inmodestia, este es el motivo por el que el Padre Pelegia explica la obligación de las mujeres con respecto a esto. Los hombres también, deben ser solícitos sobre esta virtud. Y si ellos notan que su ropa está demasiado apretada o inmodesta de cualquier otra manera, también deben ser más modestos para no ser ocasión por la cual alguna de sus hermanas en Cristo perderían sus almas a causa de que deseos ilícitos fueran provocados.

         Con este fundamento debemos apreciar el articulo clarificador del Padre Pelegia, un Doctor de Sagrada Teología. Es un sacerdote católico que por más de veinte años ha estudiado la teología moral de San Alfonso de Ligouri. El Magisterio de la Iglesia ha proclamado a San Alfonso Doctor de la Iglesia en la Teología Moral. El articulo del Padre Pelegia empieza inmediatamente a continuación:

Normas de conducta marianas

          Lo que da una guía saludable a las jóvenes y las mujeres que quieren saber lo que las autoridades buenas en la Iglesia Católica dicen sobre la modestia en el vestirse, es el programa de la Cruzada Mariana.

         Durante muchos años hasta su fallecimiento en 1969 el Padre Bernard Kunkel de la diócesis de Belleville, Illinois, E.U.A. era el Director de la Cruzada, siendo su obispo el Presidente. Las adherentes de la Cruzada se comprometen seguir las normas contenidas en Una guía de modestia para las jóvenes, que aquí imprimimos:

En respuesta a la súplica de Nuestra Señora de Fátima de la modestia absoluta en el vestirse y para ayudar a impedir los pecados incontables causados por el vestirse inmodestamente, especialmente en el verano, me esforzaré con la mayor seriedad en seguir este programa:

Abstenerme por completo de usar pantalones cortos de cualquier tipo, sea en casa o en público.
Rehusar usar otros tipos de ropa ligera, que incluye tales como trajes de playa, y los trajes que se exponen los hombros, el pecho, la espalda, o la diafragma; también evitar los trajes diáfanos o transparentes, los vestidos ligeros, los suéteres ligeros, y los pantalones ligeros; y usar solamente faldas que se extiendan suficientemente más allá de las rodillas para salvaguardar la modestia en todas las posturas y movimientos normales.
Limitar mi traje necesario de recreación o trabajo apenas a tales trajes del tipo pantalón que se extienden más abajo de las rodillas y que no son ligeros – más bien pantalones amplios de largura completa.
Ser particularmente cuidadosa en vestirme con modestia y respetuosamente para la Sta. Misa, y para todos los sagrados servicios y lugares, incluyendo los propiedades y tierras parroquiales y los Santuarios; animar a otras siempre vestirse con modestia mariana, sin miedo de ser “impopular”; conformarse a los deseos de Nuestra Señora Inmaculada en vez de los decretos de los dictadores paganos de la moda.
RECUERDESE: La modestia en el vestirse ayuda salvaguardar la virtud de la pureza y es exigida por la ley moral de Dios. Las normas en cima son basadas sobre la ley moral inalterable y sobre la tradición cristiana. Traje inmodesto es inmoral y pecaminoso, y es material para la confesión. Tenemos motivo para creer que muchas almas ahora están en el Infierno a causa de la inconsideración de jóvenes quien se visten inmodestamente. Por el amor de Cristo y Su Madre Inmaculada, y en consideración por otros que están luchando para ser puros, ¡Por favor vístase modestamente!

El Padre Bruno Pelegia; Sacerdote católico, Teólogo y Doctor de Sagrada Teología además explica:

Estamos contentos de ver aquí y allá señoras y jóvenes que no necesitan ser recordadas de seguir estas normas. Pero para aquellas que se apartan de tales normas sabias, yo, como ministro de Dios, les pido prestar atención a mi súplica: ¡No puede mantenerse una conciencia recta e incorrupta y ser tan inconsiderada!

No diga, ¿Que mal hay en la manera en que me visto?

         Porque, ¿ no sería ingenua esta pregunta? Debe sospechar que exponiéndose el cuerpo femenino como se hace, puede ser terriblemente provocativo.

No diga, ¡Aquellos que me miran así no son forzados a pecar!

         Porque lo admitimos. Pero, ¿no debemos querer reducir las ofensas que Nuestro Señor recibe cuando podamos? !Ay de nosotros si somos indiferente sobre esto! ¡Ay de nosotros, si debido de esta indiferencia, nuestro comportamiento induce a otros a pecar! Sabemos que algunos hombres buenos resistirán las provocaciones de cualquier mujer tan exitosamente que no pecarán en lo más mínimo, sino que ganarán merito. Sin embargo, algunos otros, siendo débiles, consentirán a lo que les es prohibido; y según las Escrituras, usted compartirá en su pecado por haberles dado innecesariamente ocasión para él. (Mat.18:7)

No diga, !Todas las otras jóvenes se visten en esta manera!

         Porque admitimos el hecho triste de que muchas son tan inconsideradas. Mas, aún si todas fueran tan inconsideradas, usted no debería imitar tal ejemplo. Usted se le considera como una persona capaz de tomar sus propias decisiones sabias en asuntos personales. En vista de que tiene la libertad, el privilegio, y la obligación de seguir la virtud y el Cielo, ¿seguiría al vulgo sin pensar, como las ovejas siguen al rebaño? “Entrad por la puerta angosta, porque la puerta ancha y el camino espacioso son los que conducen a la perdición, y son muchos los que entran por él. ¡Oh, qué angosta es la puerta y cuán estrecha la senda que conduce a la vida eterna, y qué pocos son los que atinan con ella!” (Mat. 7:13-14) Deje que un sentido de responsabilidad y rectitud le distinga del vulgo.

No diga, No tengo la intención de hacer lo malo.

          Porque puedo creerlo. Pero la travesura que está haciendo por vestirse sin cuidado debido a las consecuencias, es un mal del cual será responsable.

No diga, Siento que debo estar con la moda y tener un aspecto moderno.

         Porque hay mujeres y jóvenes buenas que, usando un poco de ingeniosidad, son capaz de vestirse con una cierta fuerza atractiva y encanto modesto. Pero tenga cuidado de un estilo que, tentando a los hombres a la moral corrupta, solo sirve a la vanidad y al demonio; porque es una decepción trágica. No importa como la moda cambia y el gusto popular cambia, la ley moral no cambia.

No diga, Muchas veces es difícil juzgar si un vestido sea modesto o no.

         Reflexione: Si sospecha que un plato de comida está envenenado, no lo sirve a nadie, por miedo de hacerle daño. ¿Aún más así, no debe estar sabiamente acertada cuando tenga cualquier sospecha prudente de que su manera de vestirse será una fuente de daño? ¿Y no es cierto que una conciencia recta mira al pecado como si fuera el peor daño?

No diga, ¡Rechazo ser una intolerante y una hipócrita!

         Porque ¿cómo puede ser incorrecto actuar conforme una conciencia recta, que le dice que una ofensa contra Dios Todopoderoso es, en verdad, el mayor de los males? Un intolerante y un hipócrita es uno que finge odiar el pecado y amar a Dios, cuando en realidad es indiferente sobre estas cosas. Pero le pido preocuparse de esto, y ¿cómo es mal esto? La rectitud, que a veces requiere sudor, lagrimas y el valor, nunca es la misma como la intolerancia y la hipocresía. Y los Santos que lucharon valientemente contra la inmodestia, ¿eran ellos intolerantes o hipócritas?

No diga, Los hombres me quieren así.

         Esto puede ser verdad en los casos de hombres que prefieren un poco de placer en lugar de la amistad de Dios; pero no es la verdad en los casos de hombres que viven por una conciencia recta. Además, es a Dios que algún día tendrá que dar cuenta de sí, no a los hombres.

No diga, La belleza debe ser vista.

         Podría responderle que “Cuando la belleza corporal es mostrada mucho, pierde su hermosura.” Pero hay una belleza física que no se puede mostrar sin hacerse un cebo para tentar a los hombre a satisfacciones prohibidas. De otro lado, si pensó que fuera belleza en dejar ver sus piernas, ¿por qué no hay belleza en manifestar la modestia cristiana y preocupación por el bienestar de almas?

No diga, ¡Pero tengo calor!

         Sabe como aguantar el calor cuando quiere. Ciertamente una conciencia buena merece padeciendo un poco de calor. Muchas almas buenas aguantan el calor voluntariamente para ofrecerlo a Dios como penitencia. Pero – y es triste decirlo – algunas mujeres en el tempo caliente van a la Sta. Misa y a otras reuniones parroquiales vestidas en ropa ligera pero se visten modestamente cuando tienen que trabajar en una oficina donde reciben todo tipos de clientes, o cuando tienen que dar clases, o cuando tienen que trabajar como dependientas donde tienen que satisfacer todo tipo de clientes.

No diga, Hay mayores problemas y mayores pecados que este.

         Sí. Algunos pecados son peores que otros (Juan 19:11). Mas aún los pecados menos graves son pecados reales. Uno no necesita ser un criminal perseguido para ir al Infierno. Y tengo las mayores objeciones contra viéndole ir allá. Iré allá yo mismo si no intento impedir que otros vayan.

¡Señorita, no deje que nada le defraude de una consciencia buena y de su destino eterno!

          Si usted quiere ser Cristiano en realidad y no solo de nombre, si quiere ayudar y no prohibir la acción de gracia para reformar las conciencias, si no quiere sentir mañana el remordimiento y llevar el peso de la culpa, entonces haga el esfuerzo de vestirse con modestia mariana,

…para que pueda mostrarse como una mujer cristiana y no meramente una trampa de hombres;

… para que pueda edificar y inspirar el amor casto, y no enardecer el placer prohibido.